Con lo años aprendemos a reconocer el largo y arduo camino de la 'iluminación', del conocimiento. Es interesante reconocer que no existen atajos, a pesar de los espejismos, aquellos que nosotros mismos nos creamos a lo largo del camino, muchas veces pensamos que poseemos una verdad, pero al dejar pasar unos minutos, se vuelve a escapar de nuestras manos. Podríamos también creer en que este camino de iluminación es individual, sin embargo, es más colectivo de lo que a primera vista podemos pensar. El conocimiento es un intangible que es una obra colectiva, sean científicos, humanistas, artistas, cada una, uno de los participantes de esta obra, pone un nuevo ladrillo, o página, o libro en la construcción de la Gran Biblioteca de Babel, es este contexto colectivo en que la persuasión dialógica es la mejor herramienta para medir cuanto sabemos realmente de algo.
¿Qué podría sucedernos si no sometemos lo que sabemos con los demás? (El efecto Dunning-Kruger)